lunes, 26 de mayo de 2008

Comentario de los comentarios

No os penséis que no he notado que esta semana no he actualizado, esas cosas las nota uno. Muy pronto vuelvo con otro artículo sobre finales de temporada: una cosita modesta que analiza y compara los finales de las primeras de Damages y Dexter (ya veré si soy capaz de hacerlo sin spoilers, pero en caso de que no haya tutía prometo aviso previo).

Bueno pues hoy como agradecimiento a los primeros posts de los primeros lectores, actualizo con mis comentarios-sobre-vuestros-comentarios, que la verdad es que no han dado puntada sin hilo, y merecen ser recopilados en su propio artículo. Pretendo mantener esta costumbre siempre que vea que un tema da para ello, porque además de servir para reavivar el debate y llegar a nuevas conclusiones, complementan de forma estupenda los artículos.

Eso sí, a partir de ahora cuando vuelva a comentar los comentarios, lo haré actualizando su artículo correspondiente con una de esas etiquetas tan chulas de “sigue leyendo”.

Allá vamos:

GALICIANDREAMER y MARÍA P. opinan que las series que se llaman igual que el nombre del prota funcionan muy bien cuando el carisma del mismo es “predominante y decisivo” en la historia, él cita ejemplos como House o Dexter y ella Anatomía de Grey y Veronica Mars (se os notan los cromosomas eh¿?)… bien, no es un mal argumento, pero le faltaba algo, que no era capaz de identificar, pero LEXINGTONE da en el clavo: “Puede que eso dependa de la envergadura de la serie. Cuando se crea un mundo propio, en el que se explica hasta cómo se reproducen los leucocitos, quizás un título con nombre de prota no sea lo más indicado. Mas sin embargo, si se trata de una historia pequeña en lo único que importa es ver cómo le pegan a un ciego con un palo acolchado, la cosa cambia.”

Bien. Lo que sí que he detectado es que no me habeis entendido muy bien cuando hablo de que títulos genéricos como “Lost” o “Friends” ayudan a potenciar la iconicidad de una serie. No se confunda calidad con iconicidad, en ningún momento en este artículo valoro la calidad de estas, sólo digo que sus títulos ayudan a crear la idea de Universalidad, de fácil identificación con la historia. Si se llamasen “815” o “Central Perk”, evidentemente, no perderían calidad pero puede que sí nos resultara más difícil entenderlas como paradigmas de las series de aventuras o de comedia, en estos casos.

Luego JUSTIN TIMBERLAKER explica el caso curioso de Firefly. “Firefly” es el modelo de la nave en la que viajan los protagonistas, pero al mismo tiempo es en cierto modo un personaje más, ya que en muchos capítulos se refieren a ella como… pues eso, “ella”.

Pero a mí lo realmente llamativo es que le pongan a la serie el nombre del modelo de la nave y el propio nombre de la nave, es decir: Serenity (título de la posterior peli basada en la serie). Esto sí que me escama.

De nuevo JUSTIN TIMBERLAKER y CUNDÍNS PEQUE comentan que The Sopranos evoca directamente la mafia… ummm no sé yo si no supiéramos de qué va la serie si pensaríamos en la mafia, al menos no más que con cualquier otro apellido italiano. Puede ser, no digo que no. A mí lo que sí que me parece es que ese título es bastante rompedor en el sentido de que siempre que nos encontramos con una serie centrada en una familia estos se llaman “The Bradys”, “The Winslows”, o por supuesto “The Simpsons”, pero cuando te encuentras con un apellido no americano tipo “The Sopranos” te rompe los esquemas y eso, claro, siempre es bueno. Es algo así como, esta serie va de una familia, pero que no es la típica familia… ay va! “La Familia” tampoco sería un mal título. ;)

MARQUS pone otro ejemplo que, de hecho estaba incluído en mi primera versión del artículo, y es “Cómo conocí a vuestra madre”: “How i met your mother está, afortunadamente, destinada a mostrarnos cómo Ted conoce a la madre de sus hijos y espero que no le ocurra lo que a Siete Vidas.” Pues bien, yo no soy gran seguidor de esta serie, así que no me quiero meter en camisas de once baras, pero yo creo que el problema aquí no es que el título la comprometa a nada, es precisamente la premisa, ese gran flashback que es la serie, la que lo hace… se supone que cuando la conozca se acabará?, si esto fuera así, harían que este momento fuera atrasado eternamente si la serie funcionase bien. Y en caso de que una vez que la conozca, la serie siga, entonces sí que el título se quedaría un poco fuera de lugar: porque si en el 4x22 descubrimos quién es la madre de los churumbeles, pues bueno, podemos aguantar otra temporada de “cómo conocí -a fondo- a vuestra madre” pero no más, aquí sí que el título sería un problema, y de nuevo también la premisa ya que los niños no aguantarían otra temporada más de “epílogo” de la historia.

Me he partido de risa con NORMALOVE (recientemente convertida en Sylviariel) y su “Embrujadas... pero coño, no son ELLAS las que embrujan????”

Y ya para acabar, comento uno de los títulos que deja VSANCHA: “Hill Street Blues”, que si es lo que yo creo, ya que nunca he visto esta serie, a pesar de que sé que es todo un referente y tal, pues es efectivamente muy bueno, veamos: “blues” puede ser una forma de referirse a los policías (debido al color de sus camisas), pero también puede leerse más literalmente como “música blues”, intentando que asociemos el tono y el ritmo de la serie con el de este tipo de música.

De hecho este ejemplo es muy similar al que pongo con Damages – Daños y perjuicios, que nos da la contexto y el tono en una sola expresión, a la vez que no “encorseta” el futuro de la serie”.

Ahora eso sí, el Minipunto Friki-Pop© de hoy se lo lleva LEXINGTONE por su “Parábola del hombre ciego y el palo acolchado”.

1 comentario:

Unknown dijo...

Amigo, vaya tesis doctoral sobre títulos de series :-). El título puede ser a veces un punto a favor y, a la vez, una maldición. Ejemplo, Battlestar Galactica, una serie muy seria, al estilo de Los Soprano y The Wire, con el título de una infantilada cursi de los 70. Pero así son los remakes :-)